Rehabitar el silencio

curaduría de Paola Dávila

Presentado por ProyectosJuanCano68

Ana Blumenkron

Tania Bohórquez

Sylvana Burns

Si revisamos la obra de mujeres artistas feministas producida durante los años setentas y ochentas, veremos que el cuerpo es un tema recurrente. La necesidad de trastocar la mirada patriarcal sobre el cuerpo llevó a las artistas a investigarlo, diseccionarlo, penetrar su sustancia. Pero lo que se hizo evidente, como menciona Andrea Guinta, no fueron solo los fluidos, genitales y secreciones, sino también ‘una insistencia en una lectura política que consideraba al cuerpo desnudo como portador del poder transformador’. Cuarenta años después ¿cuáles son las preguntas que se hacen las artistas que se identifican como feministas hoy en día? ¿Qué cuestionan?

Esta muestra reúne el trabajo de Ana Blumenkron, Tania Bohórquez y Sylvana Burns, artistas mexicanas que presentan obra producida en otros países, pero que entablan un diálogo con su lugar de origen. El trauma, el incesto, el poder y control sobre el cuerpo: la violencia social ejercida principalmente sobre las mujeres son conceptos que atraviesan la producción de estas tres artistas que parten del cuerpo propio o el de otras para rehabitarlos. En su obra, abordan temas recurrentes para el feminismo en relación con el dinero, el amor, el cuerpo y la sexualidad. Desde ahí producen imágenes que parten de experiencias vivenciales y se presentan desde la vulnerabilidad, pero una vulnerabilidad que desemboca en la fuerza, no en la debilidad. 

En la serie Trauma, Bohórquez crea una iconografía de sensaciones y recuerdos a partir de experiencias de violencia y abuso dentro del núcleo familiar que sitúa en el cuerpo, un cuerpo joven, andrógino, que aún no ha sido vulnerado. Parte de objetos a los que transfiere una experiencia y que son utilizados como objetos de transición hacia la resiliencia.

Con una actitud anti-solemne y humorística, Blumenkron recurre a la ficción o al sexting como zonas intermedias entre ella y la realidad o el mundo exterior, entre lo subjetivo y lo objetivo para hablar del amor, las estructuras patriarcales y las imposiciones sociales. Produce desde la autorreferencialidad, el color rosa, el velo, el fragmento -convencionalismos históricamente ligados a lo “femenino”- para evidenciar mecanismos y prácticas desde las cuales la mujer es invisibilizada, marginada y estereotipada.

Burns disecciona, analiza, examina el cuerpo femenino partiendo de la mirada patriarcal y su poder sobre la representación histórica de éste. Recrea la mirada masculina fría, científica, sobre un cuerpo que es sometido, objetualizado, que remite a composiciones de estudios médicos del siglo XIX. Crea un puente histórico al recurrir a una técnica fotográfica de la misma época, y nos confronta con una mirada de otro tiempo que no necesariamente es ajena hoy día. En Dissected la mano es la culminación del ejercicio de la fuerza y el poder sobre el cuerpo femenino. 

En su obra, Blumenkron, Bohóquez y Burns se enfrentan al mismo ejercicio de poder añejo, con estructuras compositivas diferentes. Cambian las formas de evidenciarla, mas no la violencia que se ejerce sobre nosotras. Parten del cuerpo, el sexo y el deseo como fuerzas fundamentales para hablar de eso que no se suele nombrar, para reconfigurar la realidad, para permearla, para incidir en ella.

Paola Dávila

Mayo 2022

© Ana Blumenkron

© Tania Bohórquez

© Sylvana Burns