Mentiras. Paisajes tentativos
Juan Rafael Coronel Rivera
curaduría de Alejandro Castellanos
Jueves 20 de abril - sábado 31 de mayo, 2023
Juan Rafael Coronel Rivera, Poyauhtecatl, 1995 - 2022, 40.6 x 50.8 cm / 16 x 20” (paper), 43 x 56 cm / 16.9 x 22” (frame), Ed. 1/5 + 2 AP, Signed and numbered by the artist.
METÁFORA DE LA MONTAÑA
“En esto ver aquello” es la invitación que nos hizo Octavio Paz para mirar al mundo de manera poética. Es conveniente apreciar así las fotografías de Juan Rafael Coronel Rivera, cuyo sistema creativo parte de un idealismo que conjuga tiempos y visiones; es decir, formas de comprender el mundo como un conjunto de elementos relacionados entre sí por la imaginación, por la transposición de referencias de un lugar a otro, de un objeto a otro, de una forma a otra, de una historia a otra, de un lenguaje a otro y de una imagen a otra.
Los pequeños montículos que forman los albañiles para colocar y juntar arena, cemento o piedras –humildes componentes efímeros del proceso constructivo– le han servido a Coronel Rivera como referente de otro motivo: la montaña, una de las claves del género pictórico del paisaje y un elemento geográfico que es un signo y un mito.
Sin embargo, las imágenes de Coronel Rivera no son pinturas, ya que no han sido elaboradas de acuerdo con la tradición que, para la cultura occidental, se inicia entre los siglos XVIII y XIX, cuando los artistas europeos comenzaron a representar, de manera constante, paisajes montañosos. El imaginario de Coronel Rivera proviene de otro lugar, de las representaciones míticas de las antiguas culturas que habitaron el actual territorio mexicano que hoy, de manera inconsciente, vuelven a la memoria de los constructores cuando elaboran sus pequeños montículos con los que después formarán viviendas o edificios.
La iconografía de Juan Rafael Coronel Rivera tiene su origen en una etapa muy precisa de la fotografía suscitada en los años ochenta del siglo pasado, cuando la retórica documental fue cuestionada por la experimentación con el medio, generando nuevas maneras de pensamiento sobre las imágenes. Las montañas de Juan aluden a un complejo proceso mental desarrollado por autores como Laura Cohen o Gerardo Suter –que Coronel Rivera aprecia como referentes en sus inicios en el difícil arte fotográfico–, quienes desbordaron la práctica habitual de la fotografía, creando alegorías cuando aún se asociaba el realismo con la verdad y la ficción con la mentira.
La "mentira" fotográfica de Coronel Rivera; sin embargo, no tiene la connotación negativa que los moralistas aplican al medio (y que todavía hoy es la base del documentalismo), sino al modo en que los cerritos de arena nos permiten ver aquello que está más allá de su imagen; es decir, la metáfora de la montaña. "Mentiri", el vocablo latino del que proviene la palabra "mentira" alude a una elaboración mental consciente más complicada que la verdad y, en el caso de la serie de Paisajes tentativos elaborados por Coronel Rivera, nos lleva a imaginar no solo su narrativa, sino a crear la propia y a producir, a partir del recuerdo de los mitos asociados a la montaña, nuevas maneras de pensar en lo visto.
Junto con dos series presentadas en exposiciones anteriores (“Rituales atmósferas”, en 2000, y “Ce Acatl: cuando las piedras hablaron”, de 2005), “Mentiras. Paisajes tentativos” forma una trilogía que ratifica la capacidad de Coronel Rivera para captar la energía de los elementos constructivos y arquitectónicos, transformándolos en imágenes donde podemos identificar los signos que mira al deambular como el flaneur atento que es. La inmediatez de la fotografía le ha permitido captar con vivacidad la inmensa potencia visual de la piedra, ese elemento primordial, casi invisible de tan cotidiano, que es en nuestro entorno.
Con base en ese componente las civilizaciones mesoamericanas construyeron su mayor legado: las ciudades sagradas donde dialogaban con sus dioses. Las montañas "falsas" de Coronel Rivera nos remiten a la geografía simbólica del cono invertido que es México, a sus innumerables montañas, también falsas, en forma de pirámide, elaboradas para mirar el cosmos y reciclar la vida.
Paul Westheim observó que las pirámides mesoamericanas, a diferencia de las construidas en otros sitios del mundo, poseen una alineación horizontal que las enraíza a la tierra y les da un carácter narrativo consecuente con dicho estado. Las fotografías de Juan Rafael Coronel Rivera comparten esa cualidad, ya que generan un espacio visual que puede mirarse como un relato complementario a su producción literaria y crítica. Las metáforas de su poesía, sus cuentos y sus ensayos sobre arte son la versión paralela de su obra iconográfica. La palabra y la mirada conjugan así una obra fundamental, una piedra angular en el horizonte de la cultura mexicana contemporánea.
Alejandro Castellanos