Límites Difusos
Miguel Ángel Ortega
7 de Agosto de 2013 - 5 de Septiembre de 2013

COMUNICADO DE PRENSA
Los límites entre lo urbano y lo rural, donde la ciudad  se  acaba y empieza un espacio intermedio que no le pertenece a la ciudad, pero que tampoco es precisamente el campo, son el escenario de una serie de paisajes construidos mediante la intervención lumínica y la manipulación fotográfica digital.Estos espacios que han sido alienados por la intervención del hombre y que se encuentran aislados  entre una  mancha  urbana y otra, conforman un paisaje único que  no podría existir sin la presencia de una urbe cercana. De una u otra manera la ciudad se hace presente con restos de basura, desperdicios de construcción o las ruinas de un camino. Incluso a unos kilómetros de distancia el alumbrado público ilumina el cielo nocturno manteniendo la  atmósfera  de  lo  urbano.  La vegetación  se  ve  afectada también  por  este contacto: pastizales quemados,deforestación y caminos marcados por el constante paso de la gente, son las principales huellas.  A pesar de esta presencia de lo urbano, estos espacios son desolados, se encuentran inmersos en una atmósfera de abandono, no son frecuentados ni por la gente del campo ni por la gente de la ciudad, son en su mayoría un simple paso de un lado a otro.
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